miércoles, 29 de octubre de 2008

En el cielo de Bravante

El sábado 18 de octubre pasado, fui a conversar un rato con un amigo que vive en los alrededores de Bruselas, en la provincia de Brabante Flamenco.
La localidad se denomina Overijse.
Es una región donde se combinan zonas residenciales con el campo. Todas las casas, en general, están a muy pocos metros de tierras cultivadas y zonas de pastoreo.
El paisaje es muy bonito, y en esta época otoñal, los colores de los árboles son magníficos.
La luz es también muy especial, dado que cae sesgada y cuando el sol está libre de las casi eternas nubes belgas, el efecto es de una plasticidad notable.
Así que siempre llevo mi cámara en estas salidas, y generalmente me dedico a fotografiar no solo los paisajes, sino sobre todo los cielos.
Esa mañana obtuve bastantes buenas fotos de objetos que se mueven en las alturas, por debajo de las nubes. En general no es posible distinguirlos a simple vista.
Cuando uno mira hacia esa parte del cielo, solo ve las nubes.
Luego, al llegar a casa y bajarlas al ordenador, en general me encuentro con ellos.
Como ya tengo por método, no tomo una sola imagen, sino que disparo, aprovechando la cadencia que me ofrece el equipo con el que trabajo, una toma cada tres décimas de segundo, o a veces más rápido, seis tomas por segundo.
En este caso utilicé la primera opción.
Este método me permite hacer un análisis de las evoluciones eventuales de los objetos que busco, sus rápidos movimientos, y sobre todo sus sorprendentes cambios de forma.
Lo que me propongo, con el tiempo, es ir clasificando los distintos aspectos del fenómeno, no ya para crear teorías u otras ideas fijas, que a mi se me antojan pretensiosas, sino para poder hacer una ilación, comparando detalles de lo observado en cada oportunidad, con detalles de fotos tomadas en otros momentos y lugares del mundo.
Porque sí es verdad que hay ciertas características que se repiten, aunque el fenómeno es tan variado y cambiante.
Bien.
Vamos a lo concreto:
(ya saben, click sobre la imágen para ampliar)



Esta es la primera de las ocho tomas.
Saqué de la imagen toda la parte de paisaje que en ella había, para concentrarme mejor en el objetivo de este trabajo, y por otra parte, para acercar más los puntos de los objetos. Dejé la farola que aparece debajo a la derecha, como punto de referencia para visualizar mejor los movimientos de los objetos.



En general, en el transcurso de los tres segundos que duró aproximadamente toda la secuencia, aparecen tres objetos.
Uno de ellos (C) casi siempre se mantuvo a una distancia mayor, aunque se movió vertiginosamente en algunos momentos poniéndose mas en línea con el (A) que estuvo durante ese lapso de tiempo casi en la misma ubicación, y en alguna de las imágenes desapareció por completo.
Por eso mismo, y para no complicar demasiado el estudio de estas evoluciones, no lo tomé en cuenta a la hora de ampliarlos y analizarlos.
Lo que quiero resaltar es la característica de los bordes del objeto B, si nos fijamos con atención, tienen forma de “diente de sierra”.¿Les recuerda algo esto?.
En la foto del objeto B vemos algún detalle en su parte inferior.



Comienza el desplazamiento de C mientras los otros están siempre en el sitio original, más o menos. Pasaron tres décimas de segundo desde la primera toma.
Al ampliar las imágenes, ya notamos los cambios de forma. En esta imagen, adquieren una forma “neutral” elíptica, sin mayores detalles en su parte oscura.



En la tercera toma, tres décimas de segundo más tarde, no hay mayores movimientos relativos.



Pero sí que hay cambios, y notables, en el aspecto que toman los objetos vistos desde cerca. En el A vemos con toda claridad que adquiere una forma relativamente triangular, y aparecen tres puntos oscuros en su parte inferior.
Para poder remarcar este detalle, utilicé un filtro de Photoshop que se llama, en francés tal como lo tengo en mi computadora, Passe-Haut, lo que creo que en español sería Paso-Alto.
Este filtro permite detectar y reforzar las zonas con fuerte contraste. Viene bien para este objetivo y aunque la imagen queda un poco grisácea, ayuda a ver estos detalles con gran claridad.
En el objeto B alcanzamos a distinguir un pequeño punto de otra tonalidad de gris en su centro.



Esta es la toma cuatro. Aquí ya había pasado exactamente un segundo desde que comenzó la serie.
Desaparecieron momentáneamente B y C



El objeto A vuelve a cambiar de forma, y en su “interior” podemos ver como sutilmente aparece una especie de imagen o forma, que es muy sugestiva. Aunque seguro que nada tiene que ver con ello, a mi me produjo una cierta idea cuando lo vi en el monitor.
Juzguen ustedes:



En la foto cinco vuelven a estar los tres objetos. Ya no saldrán de esta zona, en relación con la farola.



Lo notable es la forma que adquieren los objetos, en especial el A. En su parte baja aparece con absoluta claridad una equis. Tratado con el filtro Pasa-Alto, la imagen es algo diferente.
El objeto B toma una forma mas “triangular”.



En la toma seis, desaparece C. B se aleja tornándose muy pequeño. Por eso solo amplié A.



Aparece la base de A perfectamente triangular, con dos “protuberancias”



En la séptima toma, están otra vez los tres objetos.



Solo amplié A. La forma triangular de su base se deforma un poco, y se alcanza a ver, en la imagen en bajo contraste, algún detalle en la parte oscura.



Aquí la octava y última toma.



En la ampliación, el objeto A vuelve a adquirir su forma netamente triangular, y debajo se vislumbra la “equis”



Bueno.
Solo me queda especificar detalles técnicos:
Cámara utilizada: Nikon D 300
Tamaño original de las imágenes: 2164 x 1775 pxl.
D focal: 18 Mm.
Manual
Medición matricial.
V: 1/640, f: 8
ISO: 200
Las tomas se hicieron el día 18 /10 / 2008
La primera de la serie a las 13 h, 03 minutos 50 segundos
La última a las 13 h,03 minutos 52 segundos 2 décimas.
Luego de tomar estas fotos, me di vuelta e hice una serie hacia el paisaje que estaba a mis espaldas. Y allí apareció, luego en el monitor, algo bien interesante.
Pero esa historia se las cuento otro día.

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